Relatar el principio no puede ser tan complicado, aunque últimamente, por mucho que lo intente, hablar de ti me queda grande. Estos días hablo de mucho y de nada a la vez, intento escribir frases que me acerquen a ti, pero como ya agoté la mayoría de las metáforas para ocultarte ante ojos ajenos no sé que decirte. También puede ser que todo esto me pase por culpa de tanta gente que me da tanta pena, que buscan problemas en cualquier tema y me marean, me despistan, me bloquean, me envuelven en un rollo que ya no hay quién se lo crea. O porque me pode de mala leche pensar que en la calle se oyen demasiados llantos, por no decir que todos los gobiernos están llenos de gusanos. Pero lejos de estos temas que también me gusta tratar, hoy tengo la necesidad de decirte que tengo ganas de quererte, de robarte y de timarte. He de reconocer que no me importa decir lo que todos ya saben, que no me importa repetirme, rallarme, decir siempre lo mismo. Yo solo quiero que sepas que mientras me aguanten los huesos, yo quiero seguir cantando, quiero estar cerca de ti lo mas lejos a tu lado. Si tuviera ocasión de agradecer tu encanto lo haría una y otra vez, sin cansarme, porque tengo la necesidad de decirte que las gracias te las tengo que dar por el simple hecho de aparecer en mi vida. Sé que yo no tengo nada para impresionar, ni por fuera ni por dentro, pero te juro que movería montañas solo para hacerte feliz. Puede ser que al principio de todo pensara que solo te quería por puro morbo, puede que día tras día me dijese a mi misma: La verdad es que me interesa solo porque está prohibido. Pero hoy puedo decirte que te quiero de verdad, por lo que eres, por como eres, a pesar de todo, y porque sencillamente te quiero. Y espero que me comprendas, porque ¿como quieres que no te quiera si te quiero sin querer? Y aunque se que nuestra historia es la que nunca pudo ser, nunca me he dado por vencida, no por esperar nada, sino porque solo amándote ya soy alguien mejor. Aunque si me permites soñar, quiero que sepas que trataré de llevarme imágenes que me harán la espera soportable; esa espera que por desgracia nunca llegará a su fin. Para terminar, quizás un tanto cursi, quiero que sepas que te necesito aquí, cerca de mi, muy cerca de mi, muy cerca. Te necesito aquí, verte feliz, que vuelvas por mi, que vuelvas para quererme, cuidarme, acostarme, hablarme y darme la mano o un beso o un regalo. Verte conmigo, sentirte conmigo y decir que te espero que te hecho de menos. Quiero entender mi vida sin ti, saber que puedo amar a alguien más aún guardándote en algún rincón de mi corazón.
* Las oraciones en cursiva pertenecen a trozos de canciones.
Dame 10 minutos...como dice otra cancion!!...espero q la espera no desespere(dice tb)...jeje
ResponEliminaSaluditos de la chica a la espera tb.