Bloqueada

¡Por el amor de Dios! Ya he vuelto a quedarme en blanco. Lo odio. Queda poco para entregar la historia y me he quedado bloqueada. No sé como continuar. Escribo y borro. Escribo, rectifico y borro. No consigo encontrar ese punto verdaderamente interesante que mantenga al lector enganchado, quien dice al lector dice al jurado. El tema no es un problema, es complejo, pero me he documentado sobre ello. Las relaciones de los personajes son relaciones totalmente normales. Pero no se como darle un giro a la historia. Lo tengo todo esquematizado; el destino de los personajes, las consecuencias, los sentimientos e incluso el final, pero no se como unir las dos partes. Necesito ese puente para unirlas, pero no se como construirlo. Creo que he perdido el vínculo que me unía al personaje principal. Necesito volver a entrar en su mente, pero no consigo concentrarme y todo lo que escribo es verdaderamente estúpido. Quizás lo que necesito es dejar apartada la historia por un tiempo. Puede que tenga demasiadas cosas en la cabeza que me impiden vaciar la mente y meterme en la piel del personaje. Necesito tener las ideas claras para escribir el final perfecto. Ese final que hará que el lector recapacite y pueda ver que, en realidad, es un afortunado, por muchos problemas que tenga.
Quiero una historia que me llene, y de momento no lo hace. Empecé con ilusión porque escribir me llenaba, pero sin saber como continuar me siento vacía. Me levanto, bebo agua, miro por la ventana, miro el móvil, escucho música, cierro los ojos,… pero no consigo escribir algo con suficiente sentido. He probado otros lugares en los que escribir: mi habitación, la biblioteca del pueblo, la biblioteca de la universidad, delante de la chimenea,… pero ninguno de estos espacios me inspira lo suficiente. En fin, cerraré el documento de Word y intentaré encontrar ese punto que me ayude a continuar la historia.